Hace algunos días circulaba en bicicleta por el centro de la ciudad llevando “de paquete” a uno de mis hijos y por esta razón, en algunas partes “peligrosas” del recorrido, me subía con la bici a la acera (lo hago a veces; en aceras anchas, con precaución y respetando a los peatones que, por supuesto, tienen prioridad).En uno de estos recorridos por la acera pasé junto a un individuo, de aspecto extranjero, (tal vez búlgaro o rumano) que paraba a algunos peatones y les enseñaba algo que sólo pude ver durante un segundo, mientras rebasaba su posición con la bicicleta, para bajar de la acera a la calzada.
Estoy seguro de que lo que les enseñaba era un anillo (sello) de oro, por lo cual pensé que lo que estaba haciendo era vender artículos robados (¿conclusión precipitada? ¿aventurada? ¿xenófoba?).
Esta posibilidad me indignó, ya que en mi condición de “Superviviente Urbano” la delincuencia es una de mis grandes preocupaciones.
No había recorrido más de 50 mts. cuando me encontré de frente con un coche patrulla de la Policía Nacional. No me lo pensé mucho, le hice señas para que se detuvieran a mi altura y procedí a informarles de lo visto:
Les di las indicaciones lo mejor que pude y seguí mi camino con una extraña sensación causada por haber cumplido mi deber ciudadano, ser un chivato de mie... y no “tener huevos” para haberme enfrentado personalmente con el “perista”. En estas estaba yo cuando miré hacia atrás y vi que la Policía había aparcado en un lugar diferente al que yo les había indicado. Pensé (error) que no habían entendido mis indicaciones y decidí dar media vuelta para ir hacia ellos y corregirles.
Cuando los alcancé, observé que los policías, actuando inteligentemente, habían aparcado el coche algunos metros antes del lugar que les había indicado en previsión de que les descubrieran, huyeran a pie, etc.
Como ya estaba allí, decidí acompañarles hasta el lugar exacto para indicarles quien era el "sospechoso".
Nota importante: Toda esta actitud que estoy describiendo, NO ES LA MÁS INDICADA para la supervivencia urbana, ya que en mis condiciones; casi desarmado (solo llevaba mi spray defensivo), montado en bicicleta, llevando un niño pequeño, etc. no es aconsejable “meterse en follones”.
A pesar de que habían pasado menos de 2 minutos, allí no había ningún rastro de actividad ilegal de ningún tipo. (¿Casualidad? ¿Compinches que habían observado toda la escena? ¿Imaginaciones mías?)
Los policías, cumpliendo con su obligación me hicieron algunas preguntas sobre las características del individuo sospechoso: Altura, complexión, vestimenta, rasgos distintivos, etc. y en ese momento me di cuenta de que apenas podía dar mas datos que: varón de aspecto extranjero y ropa oscura.
No era capaz de recordar si llevaba manga larga o corta, su estatura, su complexión, si tenía tatuajes, etc.
Yo que siempre me he considerado un "atento observador" de lo que sucede a mi alrededor, comprobé decepcionado que había cometido un fallo de principante y que diariamente se me pasan por alto muchos detalles que en un momento dado pueden ser determinantes, para, como en este caso, identificar al sospechoso de cometer una actividad delictiva. ¡Y eso que yo no era víctima personalmente de un hecho violento! Si añadimos a mi incompetencia y falta de previsión, que me hubieran atacado por sorpresa, seguro que no hubiera aportado ninguna información interesante a la Policía.
Esto me ha hecho "darme un tirón de orejas virtual" (Muy mal, Javier, muy mal) y me he puesto las pilas, para que en ocasiones similares que puedan ocurrir en el futuro esté pendiente de esos "detalles" que en esta ocasión se me escaparon.
Nota: El gráfico que acompaña a esta entrada, a pesar de que está en inglés, puede servir para conocer y recordar los detalles más importantes que hay que tener en cuenta en una situación así.
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